de Ulises Lencina, el Lunes, 7 de mayo de 2012 a la(s) 0:18
A Laly no le gustaba su nombre se llamaba Gladys Noemí Cobas.
Era
una diosa, que ocultaba su romance con Serrat -el Catalán lo hizo
público por eso lo cuento- porque decía que ningún tipo soportaba salir
con ella después de Joan Manuel y nadie le daba bola ( habia cumplido el
sueño se miles de minas argentinas pero lo ocultaba,igual que ahora
verdad? que sos tapa hasta si comés puchero con Jabobo).
Transgresora para su época, a los gay los llamaba “putillos” porque la palabra “puto no era refinada”…
Siempre
estuvo loca… y nunca tuvo plata… se la gastaba…en libros y zapatos…una
vez me dijo…”Si no tuviera tan mala prensa sería Imelda Marcos” (era la
esposa del dictador filipino Ferdinando Marcos a quien le encontraron en
su placard 3000 pares )….
En la vieja Gata Alegría ordenaba un
desayuno de medialunas con jamón y queso tostadas, un licuado, un huevo
y un agua Villavicencio- sin gas- y exigía a Tito, el mozo, que se la
abriera en la mesa, porque era paranoica y temía algun contagio, se
“tomaba todos los colectivos” que fletaban Néstor ( que un día le hizo
comprar una alarma a pilas) y el Pigüi un motoquero del canal a quien
amaba…el desayuno quedaba siempre a la mitad, la “loca” a las 8 de la
mañana ya se había fumado medio atado de LM suaves.
Era radical,
aunque un día Alfonsín la recibió con un afectuoso “hoy viene la
peligrosa” y Menem la evitaba, preguntaba (verbo y acción que hoy no
usan los periodistas de la calle mal llamados “movileros”).
Era
“loca” sin matices, te amaba o te odiaba, era una loca predecible,
tierna y querible, que te pedía guita y la anotaba en una libreta de
almacenera y cuando cobraba te perseguía para devolvertela.
Tenía
aires de “diva” y un físico y belleza envidiables, leía todo lo que
llegaba a sus manos, diarios, revistas y libros con la misma voracidad
con la que consumía a veces más de dos atados de puchos…
Cuando
rompía demasiado las pelotas don Luis Clur le conseguía un adelanto de
sueldo y la mandaba a hacer alguna nota cerca de recoleta, para que
pasara por Lonté y se comprara carteras y zapatos,…ahí dejaba de joder
por unos días.
Tenía carácter, no mal carácter, tenía bondad en su
corazón, tenía talento e inteligencia, era contradictoria, porfiada y
jodida; era una buena mina transparente y no ocultaba nada…
Nunca
más la vi aunque nos mandábamos saludos por amigos comunes, el
miércoles con un “sobreviviente” de Canal 11 y Telefé, hablamos de
ella…está mal me dijo…”empastillada”…no pensé que era la antesala del
desenlace…
La recuerdo concentrada, leyendo y puteando por y con
los diarios, tenía cierta ingenuidad e ignorancia deportiva una vez me
preguntó si no me alcanzaba con escuchar solo un tiempo de los partidos
de “football” -sic.
La recuerdo loca y divertida, como esa mañana
de 1986 cuando bajó al segundo subsuelo del “noti” y pisó al gato
(mascota del canal) y el felino le arañó las medias no le hizo nada pero
insistió en darse la vacuna antirrábica,Lito le decía que en realidad
habia que vacunar al gato; en Cartagena de Indias pidió (sin prestar
atención) una sopa de tortuga y luego le preguntó al mozo si las
mataban para cocinarlas acto seguido, se arrepintió , no cenó y se
largó a llorar…
La recuerdo cuando íbamos a Canal 11 en el
colectivo 188 y cuando ya, señora periodista, pedía un remise “con un
chofer que no escuchara football, ni radio Rivadavia, ni usara
desodorante de ambiente de telo barato”…
Se murió pobre y
olvidada, y yo también la olvidé, la echaron del canal porque tenía casi
50 y preguntaba, la echaron como a mi ,los Vigil,Moneta y Menem,los
mismos que echaron y desaparecieron a periodistas en épocas del proceso y
en épocas democráticas,claro que en este último caso presciendieron de
la desaparición física, la echaron por leer libros y preguntar la
echaron y ya había cumplido casi 50…no volvió a la Tele, ni jamás
llamó por teléfono –aun en la miseria y en la pobreza, se murió como
vivió-con dignidad…
Partió una loca linda Laly Cobas….